En Can Roca, cualquier día a las ocho de la mañana, puedes ver a los vecinos en el bar de la esquina, justo al lado de la parada del 5 en la Avenida de Can Roca. Entre café y café, las conversaciones suelen girar alrededor de lo de siempre: el tráfico, el aparcamiento y esa eterna espera del autobús. “Ojalá tuviera moto”, dice más de uno. Y ahí entra el tema del Permiso A2.
Si vives en Can Roca, sabes que moverte por Terrassa puede ser un desafío. El Permiso A2 no es solo un papel. Es la libertad de decidir cuándo y dónde ir sin depender de horarios ajenos. No es solo para los que sueñan con la carretera. Es para quienes, como tú, quieren ahorrar tiempo y ganar independencia.
Laura, por ejemplo, vive en la calle Baldrich. Vino el otro día con dudas. “He pensado en sacármelo”, dijo mientras miraba el mapa de Terrassa que tenemos en la pared. “Pero no sé si es el momento”. Al final, se dio cuenta de que esperar a que todo sea perfecto es como esperar que la calle Baldrich tenga siempre un sitio libre para aparcar: no va a pasar.
Imagina por un momento: arrancar tu moto en la mañana, sentir el viento en la cara mientras subes por la Rambla d’Ègara. La ciudad despierta y tú ya estás en marcha. No más depender del reloj del autobús. No más excusas.
¿Vas a seguir pidiendo que te lleven o lo hacemos ya?
En Autoescuela Piedra, estamos aquí, en Terrassa, no somos unos extraños. Sabemos que Can Roca tiene su propio ritmo. Entendemos tus dudas y estamos listos para resolverlas. Nuestro asesoramiento es personalizado porque cada uno tiene su historia y su razón para querer ese Permiso A2.
Desde Can Roca, llegar hasta nosotros es un paseo. En coche, son apenas 10 minutos, y si prefieres caminar, en 25 minutos estás aquí. Conocemos cada esquina de Terrassa y cada atajo, porque la ciudad es parte de nosotros.
No te vamos a pedir nada. Solo te decimos: si lo vas a hacer, que sea con nosotros. Te esperamos, con un café listo y las ganas de ayudarte a conseguir tu Permiso A2.