Esta mañana, mientras paseaba por la calle Baldrich en Can Boada del Pi, escuché a dos vecinos hablando. Uno le decía al otro que ya estaba cansado de depender siempre de alguien para ir al centro de Terrassa. “No aguanto más”, decía, “necesito empezar de una vez el Curso de Amaxofobia”.
Y es que en este barrio, donde el autobús a veces parece que vuela y encontrar aparcamiento es casi un deporte extremo, la idea de conducir puede dar vértigo. Pero no tiene por qué ser así. El Curso de Amaxofobia no es solo un curso; es la puerta a la libertad de moverte sin miedo, a cualquier hora, en cualquier lugar.
Laura, que vive justo al lado del bar de la esquina donde siempre tomamos café, se pasó el otro día por la autoescuela con mil dudas. Su historia es de esas que te suenan. Empezó a evitar conducir después de un pequeño accidente en la rotonda de la calle Egara. Pero Laura decidió que ya era hora de dejar de pedir favores y recuperar el volante.
Imagina esto: estás al volante, en un coche que ya no es una jaula, sino un puente hacia donde tú decidas ir. Un camino que puedes tomar en tus propios términos. Sin miedo. Sin ansiedad.
Entonces, ¿vas a seguir pidiendo que te lleven? ¿O lo hacemos ya?
En Autoescuela Piedra, somos parte de esta comunidad. Sabemos lo que es vivir en Terrassa, en Can Boada del Pi. Sabemos que desde aquí, llegas a la autoescuela en 10 minutos a pie, y en 5 si decides venir en coche. Estamos aquí, justo al lado, listos para ofrecerte un asesoramiento personalizado. Porque entendemos que cada historia es única.
Así que, si vas a hacerlo, hazlo con nosotros. Sin adornos. Sin rodeos. Solo lo que necesitas para que, la próxima vez que pasees por la calle Baldrich, lo hagas pensando en tu próximo destino. Con las llaves en la mano.